Podcasts
Meditaciones de Pascua
¡Cristo ha resucitado! Busquémosle. Así comienza Abelardo de Armas, Cruzado de Santa María, la primera contemplación de esta colección de meditaciones para el Tiempo Pascual. Estas meditaciones nacen de una profunda vida de oración del autor, y son para llevarlas a la vida, al día a día.
- Detalles
“Si Él está conmigo, ¿quién contra mí?” En esta meditación, Abelardo de Armas explica que el Señor siempre está con nosotros, Él nos lo ha dicho y su palabra no puede fallar. No hay nada que padezcamos que no lo padezca Él en ti. No hay fuerza que necesites que Él te la niegue.
- Detalles
En esta meditación, Abelardo de Armas nos exhorta a dejar que Jesús se nos acerque, cada día más, sin tener miedo. Verle en Galilea o en la sencillez del sagrario, desde donde nos dice: “me ha sido dado todo poder en los cielos y en la tierra”. Él es mi Rey y vive conmigo, y está en mí, en medio, me ha unido a Él.
- Detalles
En esta meditación, Abelardo de Armas reflexiona sobre los momentos previos a la Ascensión. Cómo los apóstoles le adoraron, y que eso es lo que tenemos que hacer nosotros, ver a Jesús en todo. Ser sumisos, obedientes, adorarle y enseñar a los demás a hacer lo mismo.
- Detalles
En esta meditación Abelardo de Armas explica que es necesario estar quietos con la cabeza, con el cuerpo, con el corazón. Ser testigo de Jesús es ser mártir de Jesús. Sin salirse del corazón de la Virgen. “Seréis testigos míos”, seréis Yo allá donde vayáis.
- Detalles
En esta meditación, Abelardo de Armas reflexiona sobre que el Señor elige a quien quiere, no por nuestros méritos, sino por puro amor. Y yo tengo que poner mi corazón en Jesucristo y enamorarme de Él porque Él se ha enamorado de mí, y me ha elegido a mí.
- Detalles
Abelardo nos presenta hoy la aparición de Jesús resucitado junto al lago Tiberiades y nos dice, usando este relato que, si queremos ser fecundos en el apostolado, la pregunta que se nos hace NO es: “¿Quieres a las almas?” La pregunta es: “¿Me quieres a Mí (a Jesús)?” Pues si me quieres a Mí apaciéntalos a ellos. Tras esto Jesús le dice “sígueme”. A ti se te ha dicho ya lo que hay que hacer y no queda más que obrar y callar. “Tú, sígueme”. Lo demás, ¿qué te importa?
- Detalles
En esta meditación, Abelardo de Armas explica el encuentro de Jesús con los discípulos durante la pesca milagrosa. Cómo los discípulos, desde la Pasión, se sentían pequeños y obedecen ante el mandato del Señor: “echad la red”. El primero en reconocer al Señor después del milagro fue Juan, el discípulo que tanto amaba el Señor.
- Detalles
En esta meditación, Abelardo de Armas reflexiona sobre la frase de S. Pedro: “voy a pescar”. Para ir a pescar, para ir a hacer oración, hay que salir, salir de uno mismo y olvidarse. Mientras estés metido en ti mismo no haces nada. Al amanecer, Jesús apareció pero no le reconocieron. Otra vez la cercanía de Jesús en nuestras vidas y no le conocemos.
- Detalles
En esta meditación, Abelardo de Armas explica que, después de la muerte de Jesús, cuando Pedro vuelve a pescar, ya no lo hace por él, sino que tiene su mirada puesta en el Señor. Y dice que ese «seréis pescadores de hombres», significa que yo tengo que estar con Jesús, no solo en la oración, sino en medio de las actividades diarias.
Más artículos…
Página 2 de 6



